domingo, 26 de mayo de 2013

El grafeno y la ignorancia de los expertos.

Si alguien hubiera preguntado en 2004 a  los 100  mejores expertos del mundo   en nanoelectrónica sobre la idea de exfoliar un pedazo de grafito con celofán,  frotar, esperar a tener suerte para que alguno de los pedacitos  que quedaran pegados  fuera un único plano atómico,  todos hubieran  respondido igual: no es posible. Alguno habría incluso aludido a teoremas de prestigiosos físicos que establecían la inexistencia de cristales bidimensionales.  Si además les hubieran preguntado si sería posible fabricar un transistor de efecto campo con ese plano atómico,  habrían  respondido "muy difícil" o "imposible".   Si les hubieran preguntado por la movilidad de dicho dispositívo, es decir, por su calidad como transistor, habrían  anticipado: "horrible",  ya que el conocimiento establecido en 2004 era que las superficies son la principal causa de pérdida de movilidad en un transistor, y más aun si se trata de una superficie "sucia" o plagada de contaminación como la que uno supone que tendrá el grafeno exfoliado con celofán.

Si les hubieran pedido evaluar la probabilidad de que en semejante dispositivo pudiera observarse el Efecto Hall Cuántico (EHC),  se habrían  reído. El EHC únicamente se observaba en transistores de GaAs  preparados de forma extremadamente  cuidadosa para lograr altas movilidades con máquinas de crecimiento epitaxial que cuestan 1 millón de euros.   Si les hubieran preguntado sobre las propiedades mecánicas, es probable que hubiesen  dicho que el hipotético grafeno sería un material frágil, tratándose de un único plano atómico.

Si les hubieran preguntado por las posibles aplicaciones en fotovoltáicas de un material estrictamente bidimensional habrían dicho que poco prometedoras, en el mejor de los casos, pues  la absorción de luz es proporcional al grosor del sistema.     Si hubiesen preguntado a esos 100 expertos sobre la eventualidad de que una revolución en la física de materiales naciera de un tipo que se había llevado el IG Nobel por levitar ranas,   tampoco habrían sido muy optimistas.

Afortunadamente, en un  laboratorio de la no terriblemente prestigiosa Universidad de Manchester, del cuál casi nadie esperaba que naciese una revolución, unos tipos rusos, Novoselov y Geim,  que ahora sabemos que son geniales,  estaban trabajando en responder de forma positiva a todas estas preguntas, dejando claro que no te puedes  fiar de  los 100 mejores expertos,   ilustrando con contundencia  la frase de  Feynman: "science is the belief in the ignorance of experts".

Hoy,  apenas transcurridos 9 años,  la Unión Europea va a lanzar un programa "buque insignia" o "flagship" sobre el material que habría hecho reír a los expertos.   Se han creado varios centros de investigación en grafeno, alguno de ellos empezando de cero como el de  Singapur.  Se han publicado más de 20 mil artículos sobre el tema, decenas de libros  y se han descubierto al varios  materiales bidimensionales más. Numerosas   Universidades de las mejores  del mundo han contratado profesores para dedicarse en exclusiva al grafeno, se han creado varias conferencias específicas dedicadas a este material, a las que asisten centenares de científicos de todo el mundo. Samsung tiene a decenas de ingenieros trabajando en su  uso  para  varias aplicaciones comerciales y se han creado varias empresas cuyo negocio es producir y vender el material que no podía existir.

A la luz de todo esto,  ¿qué posibilidad tenemos de predecir fiablemente  el futuro?.  ¿Cómo podemos  anticipar la evolución de un campo de investigación en que  quizá haya ahora mismo  otros tipos geniales trabajando en lo que será otra revolución?.  ¿Qué sentido tienen los programas marco a 7 años vista?.   ¿No deberíamos ser todos mucho menos pesimistas a la hora de juzgar lo que es posible y lo que no?.  ¿No haríamos bien en darle una oportunidad a las ideas aparentemente insensatas, sin caer por ello en  brazos de locos y charlatanes?  ¿Y cómo diferenciar a un visionario de un charlatán?.  De esto hablaremos otro día.

jueves, 23 de mayo de 2013

John Bardeen y el curso de la historia

Se cumplen este jueves 23 de Mayo 105 años del nacimiento de John Bardeen.  La  inmensa mayoría de la gente que vive rodeada de miles de millones de transistores no sabe qué es un transistor,  quién lo inventó, cuándo, y cómo ese hecho ha cambiado el curso de la historia.   El anonimato de John Bardeen para las grandes masas  adquiere tintes surrealistas porque el héroe de esta historia  se llevó el premio Nobel de Física dos veces, siendo la única persona en conseguir semejante logro.

Su primer premio Nobel lo recibió  en 1956,  compartido con  su colega Walter Brattain y con el jefe de ambos, William Shockley, por la invención del transistor.  El  segundo,  en 1972,  junto con su estudiante de doctorado   Robert Schrieffer y su postdoc  Leon N Cooper ,   por el desarrollo de la teoría de la superconductividad, posíblemente uno de los  logros con más influencia en la física teórica de la segunda mitad del siglo XX.  De la teoría de la superconductividad y sus implicaciones en otros campos, muy especialmente en física de partículas y en el llamado bosón de Higgs (Higgs-Anderson en este blog),  hablaremos otro día.

Un transistor es como un grifo para la corriente eléctrica.  Al igual que un grifo sirve para controlar el paso de agua por la  cañería que lo integra, un transistor es un dispositivo que permite controlar, mediante la aplicación de una campo eléctrico,  el paso de corriente entre dos de sus terminales.  La modulación  de la amplitud de la corriente  eléctrica, haciendo uso de otra señal eléctrica lleva de forma natural al concepto de amplificación.   La invención del primer transistor, por  John Bardeen y Walter Brattain, allá por el año 1947, en los laboratorios de la ATT,  resolvió un problema tecnológico:  los transistores substituyeron a las válvulas de vacío que se estropeaban con gran facilidad, por no mencionar que tenían un tamaño enorme  (centímetros).

El transistor de Bardeen-Brattain-Shockley (BBS)  fue posible gracias, entre otras cosas, a los avances en la comprensión de la estructura electrónica de los materiales semiconductores, como el Silicio o el Germanio y muy en particular el estudio del comportamiento electrónico de sus superficies e intercaras. O sea, es uno de los hijos de la mecánica cuántica.  Ahora nos parece banal, pero en el año 47 la teoría cuántica estaba entrando en su mayoría de edad y la teoría de los estados cristalinos de Bloch tenía acné. Además,  uno de los tipos más brillantes e influyentes de la época, Wolfgang Pauli,   que había recibido en 1945 el premio Nobel por su descubrimiento del principio de indistinguibilidad de las partículas cuánticas que lleva su nombre, había advertido sobre la dificultad de trabajar en el estudio de los semiconductores: "One shouldn’t work on semiconductors, that is a filthy mess; who knows if they really exist!" y sobre las superficies: " God created the solids, the devil their surfaces."

La invención del transistor tuvo lugar en los legendarios laboratorios de la compañía  ATT, los "Bell Labs", de donde saldrían además el laser,  el satélite de comunicaciones, y el sistema operativo Unix.    El enorme impacto que tuvieron los investigadores en los programas de desarrollo de tecnología bélica en la segunda guerra mundial, con el radar y el proyecto Manhattan como los dos exponentes más obvios,  demostraron la rentabilidad de invertir en investigación aplicada a empresas como la Bell.  Es igualmente interesante que en esos laboratorios se llevaron a cabo numerosas investigación de carácter fundamental, como relata uno de los protagonistas,  P. W. Anderson, en su libro "More and Different".

Los ingenieros y físicos  de la Bell, liderados por W. Shockley,  comprendieron enseguida el potencial de un dispositivo semiconductor que podía actuar como amplificador y podía remplazar a las válvulas. Con la llegada de los circuitos integrados, en la década de los 60, la producción de transistores a gran escala hizo posible la electrónica de consumo primero, los ordenadores personales después, así hasta llegar al día de hoy.  En 2012 se fabricaron 60 millones de transistores.... por persona !.   Si de mi dependiera, le cambiaría el nombre a alguna avenida y le pondría el de John Bardeen.

Finalmente, tengo que decir que   llegué  a tercero de carrera sin haber oído hablar  de John Bardeen.  Allí nos hablaban del trabajo de  Newton,   Coulomb, Faraday, Maxwell, Boltzmann,  Planck, Einstein, Bohr, Schrodinger, Heisenberg,  y luego 70 años casi en blanco hasta llegar  a Stephen Hawking, del cuál te hablaban los periódicos.   Nadie, en aquellos primeros 3 años de carrera,  nos   contó qué conexión había entre la mecánica cuántica y la historia fascinante de como se pasó de ir en taparrabos, tecnológicamente hablando, a tener un ordenador en casa con 100 veces la potencia de cálculo de los ordenadores que gestionaron la llegada del hombre a la luna (hablo del 1992, ahora un móvil supera ampliamente esa cifra).  Desde aquí le quiero dar las gracias a Fernando Sols,  el profesor que tuvo a bien hablarnos de John Bardeen, sin venir a cuento, en una clase de Métodos Matemáticos. Supongo que Fernando debió pensar lo mismo que yo ahora: que hay que contarle a la gente que hubo una vez un señor llamado John Bardeen que cambió el curso de la historia.

martes, 21 de mayo de 2013

Retener talento

Casi nada que objetar al contenido de la carta " Nueva Carta por la Ciencia: salvemos la I+D+i en España" que está circulando estos días.   La carta  critica los recortes que ya se han implementado en el gasto público en I+D,  denuncia que el gasto en este capítulo estará congelado hasta 2020,  critica la paralización de las nuevas convocatorias, así como el secuestro de los proyectos que debían haber empezado en 2013 y advierten de la "pérdida de capital humano" que es consecuencia de la drástica reducción en el número de plazas.

Llegado el punto 5 de la carta, se lee "Los contratados Ramón y Cajal, investigadores de destacada experiencia internacional y prestigio en su campo, que se recuperaron del éxodo con promesas incumplidas de estabilización, deben ahora, en muchos casos, volverse a expatriar" y luego en el segundo punto de decálogo  de "demandas" se puede leer:
"2)  Coherencia en la política de recursos humanos para atraer y retener el talento en España, manteniendo el talento actual y en especial los contratados Ramón y Cajal,.."

Decía que casi nada que objetar al contenido, pero ...... ¿qué deberíamos hacer si el colectivo de Empresas productoras de tabaco redactase un informe a favor del aire limpio?.  ¿Qué postura tomar si la asociación de toreros hiciera una carta abierta contra el maltrato animal?.  ¿Podrían los productores de "Tómbola" y "Aquí hay tomate" firmar un manifiesto contra la telebasura?.  

Al tema: ¿Puede la CRUE firmar una carta pidiendo "coherencia en la política de recursos humanos para atraer  y retener talento"?.   ¿Puede la CRUE,  o sea,  la conferencia de Rectores de Universidades Españolas,  pronunciar ni tan siquiera la palabra talento sin que nos aumenten las pulsaciones?.   Un dato sobre el tema. En este excelente informe elaborado por el BBVA y el IVIE se recoge la siguiente afirmación, relativa a los profesores de Universidad de España: 

"Hasta 2009 solo uno de cada cinco profesores tenía reconocidos todos los tramos de investigación (conocidos como sexenios) que podía obtener y, como recoge el gráfico 4, en conjunto solo se habían reconocido el 43,7% de los sexenios potenciales."

¿Puede la CRUE ponerse estupenda con los contratados Ramón y Cajal?.  Los rectores de muchísimas universidades españolas han estado ninguneando, haciendo de menos y poniendo trabas  a ese colectivo. ¿Exagero?.   El gobierno anterior tuvo que inventarse un programa (I3)  para sobornar, literalmente, a las Universidades para que dieran contratos indefinidos a los  contratados RC una vez que había acabado su contrato de 5 años con una evaluación positiva.  El soborno consistía en abonar el equivalente al sueldo bruto de 3 años a la Universidad a cambio de hacer fijo  al RC.    ¿Tuvo que incentivar alguna vez nadie a las Universidades para que hicieran funcionario a miles de fulanos (y fulanas) cuyo único talento consistió en "atornillarse a la silla"? .  

No cabe en la entrada de este blog, ni en un libro de mil páginas, la  historia que se ha escrito en la Universidad pública española en las últimas 3 décadas de despilfarro de recursos públicos,  de contratación de un auténtico ejército de mediocres, de miles de plazas de profesor de Universidad en las que no había más que un candidato, tribunales amañados, decisiones vergonzantes,   chanchullos,  trampas,  intercambios de favores, y  todo el mundo callado.  

Las consecuencias están ahí.  Ninguna Universidad pública entre las 200 mejores del Mundo.   ¿Cómo puede ser que tengamos el mayor grupo textil del mundo (Inditex), el séptimo mayor banco del mundo (Santander), una de las 10 mayores petroleras privadas del mundo (Repsol),  una de las 5 mayores compañias de telecomunicaciones del mundo (Telefónica), los mejores clubes de fútbol del mundo (Real Madrid y Barcelona) y no colemos ninguna Universidad entre las 200 primeras?.  ¿Cómo puede ser que   3 escuelas de negocios privadas españolas están entre las 25 mejores del mundo, según el ranking elaborado por The Economist y las todas las universidades  públicas españolas  están por detrás de Universidades de  Canadá, Australia, Brasil, Singapore, Holanda, Bélgica, Noruega, Méjico, Taiwan, China, Corea del Sur?.

Y ahora nos vienen los gestores de este desastre a pedir "coherencia en la política de recursos humanos para atraer  y retener talento".    Y lo firman de la mano de UGT y CCOO, que han sido cómplices y coautores de una política de recursos humanos que ha menospreciado el talento y ha convertido "el café para todos" en uno de los  principio fundamentales del movimiento.

Yo no se si puedo  firmar cartas de apoyo a los derechos humanos redactadas por tribus caníbales,   que va a ser que no, pero mientras me lo pienso  le pediré a la CRUE que se hagan mirar lo de los profesores sin sexenios y lo del talento.

PS: por su interés, incluyo la figura a la que hace alusión Carmen Ocal en el primer comentario, extraida de un informe del CNEAI elaborado por los catedráticos Agrait y Pobes,  físicos de la Universidad Autónoma de Madrid.  Este es el nivel, Maribel.



domingo, 19 de mayo de 2013

Programa Ramón y Cajal: guia rápida para opinadores apresurados

Como comento en mi entrada anterior, el Programa Ramón y Cajal ha saltado a  los medios y a las columnas de conocidos creadores de opinión   debido a un  escándalo que no era tal,  a saber,  que el  erróneamente proclamado mejor físico (joven) de Europa no había obtenido un  puesto en la convocatoria cuya resolución se publicó hace unos días.

He leido estos días muchas inexactitudes, e incluso algunas solemnes tonterías, sobre el programa RC,  sobre su limpieza y  su finalidad.   Para intentar compensar el desequilibrio entre opiniones apresuradas y opiniones informadas,  quiero destacar dos  errores habituales sobre el RC:

1)  El programa RC concede contratos de trabajo, de 5 años, y no becas, como se repite una y otra vez.  La remuneración de un contrato RC es  equivalente a la de Profesor Titular de Universidad (que es un puesto de funcionario).

 Por tanto,  es absolutamente incorrecto,  y escasamente elogioso, referirse como "becarios" a los contratados dentro del programa RC, cuyo perfil habitual es el de un Doctor con más de 4 años de experiencia postdoctoral.   De hecho, la figura de becario está desapareciendo del sistema científico español, lo cual ha traído muchas ventajas, pero también algunos inconvenientes.

2)  Los mecanismos de contratación del RC son muy diferentes a los de otros puestos académicos, como profesor de Universidad e Investigador en el CSIC.  Aquí van unas cuantas diferencias:

  • La contratación del RC está centralizada, lo cual reduce muchísimo la posibilidad de enchufes y apaños. Todas las solicitudes de un área son examinadas por una comisión (dentro de la cual se reparte el trabajo en subcomisiones).   Así,  centenares de solicitudes para el área de Física,  son examinadas por  una veintena de expertos, profesores de Universidad e investigadores del CSIC y otros centros,  alguno de ellos en el extranjero.  Por tanto, los ojos de centenares de candidatos y de sus colegas, están encima de esa comisión. 
  • En cambio, en una plaza de profesor titular suele haber muy pocos aspirantes, muy a menudo uno solo,  y la contratación la decide un panel de 5 profesores,  incluidos colegas del mismo departamento del aspirante, que en la inmensa mayoría de las ocasiones ya ocupa un puesto interino en el departamento en cuestión. 
  • En los tribunales de profesor de Universidad es muy infrecuente (no recuerdo ningún caso y de hecho ni siquiera se si está contemplado) que participe un investigador trabajando en el extranjero
  • Igualmente, es espectacularmente infrecuente que  en una  oposición a profesor de Universidad gane un candidato que no estuviese previsto, e igualmente infrecuente que no haya un candidato previsto.   
  • En el CSIC el proceso de asignación de plazas de funcionario está menos "controlado", y por tanto es más abierto, lo cual origina que haya varios candidatos por plaza, aunque no siempre sea sí. 
Por tanto,  si los opinadores apresurados quieren seguir ejerciendo un  derecho que se está instaurando de facto en España, el de estar indignado y  bramando contra alguna de las miles de cosas que efectivamente funcionan mal en nuestro país,  les sugiero amablemente que dirijan sus iras hacia los mecanismos habituales de contratación de las Universidades Públicas Españolas , y no hacia el programa Ramón y Cajal, que es una de las pocas cosas que si funcionan medio bien.  Pregúntense por qué ninguna de nuestras Universidades está entre las 200 mejores del mundo,  y  todas ellas están detrás de varias de países que invierten mucho menos que nosotros en educación.   

PS: son las 15h del domingo 18 de mayo y Diego Martínez Santos sigue sin matizar el aluvión de noticias que le califican como mejor físico (joven) europeo.    

viernes, 17 de mayo de 2013

Escrache a la comisión del "Ramón y Cajal"

La denuncia por parte de varios medios de que el "mejor físico (joven) de Europa", no tiene sitio en España, y las reacciones consiguientes,  ilustran bien a las claras varios de los problemas que afectan al I+D español,  como por ejemplo  el de nuestra proyección sobre la sociedad a través de los medios, o el de la falta de recursos. La polvareda que se está levantando pone de manifiesto varios de nuestros males nacionales: la demagogia, (a la que me apunto en esta entrada),  el hablar contundentemente sobre temas de los que no se  tiene ni idea, y el apuntarse a la causa  de cualquier indignado, tenga razón o no.




Primero vayamos a los hechos contrastables:
* Diego Martínez-Santos (1983) , físico de partículas,  es   uno de los muchos candidatos al programa Ramón y Cajal que no ha logrado el contrato (que no  beca).

* Diego Martínez  Santos    ha recibido un premio de una de las diez divisiones con las que cuenta el European Physical Society (EPS): la  High Energy & Particle Physics Divsion (Fïsica de Altas energías y de Partículas).

* Esta sociedad otorga, aparéntemente con carácter bianual,  5 premios.  En el caso del premio concedido a Diego Martínez Santos, se trata un premio de mil euros (1k€).

* Así,  por recibir uno de los 5 premios que otorga una de las 10 divisiones de la EPS,   de mil euros, ha llevado a varios medios (El Mundo, El País, El Confidencial)  a proclamarle el mejor físico joven de Europa, o incluso el mejor físico de Europa.

*Así mismo, varios famosos opinadores han comenzado a  criticar antes de informarse mejor.   Así,  Elvira Lindo dice en su  columna de El País: "... Diego Martínez Santos, el físico gallego que casi a la vez ha obtenido dos logros tan significativos como contradictorios: el de ser nombrado mejor físico europeo por la Sociedad Europea de Física y el de que se le haya denegado su vuelta a España con el programa Ramón y Cajal de investigación, por considerar el comité seleccionador que su currículum no está a la altura. ¿A la altura de quién? A la altura de los individuos que hacen la selección". Y Forges, en el mismo medio,  le echa la culpa a la Secretaría de Estado de Investigación, nada menos.

*Tanto Forges, como Elvira Lindo,  como un torrente de foreros y blogueros indignados, dan por buena la premisa de que el tal Diego Martínez Santos, al que hasta hace dos días no conocían, es de hecho el mejor físico (joven) de europa y  ha sido víctima de una injusticia por parte de la Comisión de Selección del programa Ramón y Cajal,   o por parte del gobierno.

* Uno de los miembros de la Comisión de Evaluación es Bernardo Adeva Andany,  co-director de tesis del presunto damnificado por la Comisión.   Sugiero al comité de indignados dirijan sus preguntas al co-director de tesis, y con quien ha publicado 20 artículos, de acuerdo con el Web of Science

* Son las 15 horas del viernes 17 de Mayo y no he visto ninguna nota de desmentido por parte de Diego Martínez Santos al respecto de ser el mejor físico joven europeo, ni para defender la profesionalidad de la comisión.  En cambio, he visto que Diego piensa  que el premio le ayudará a conseguir una Starting Grant del ERC (European Research Council).   Mucha suerte.

Yo desde aquí simplemente quiero decir  2 cosas:
1) A los creadores de opinión en general, y muy en especial a gente con la influencia de Forges y Elvira Lindo, que tengan más cuidado a la hora de poner en la picota la reputación de la gente, sean Secretarios de Estado o evaluadores de la comisión del RC.   La información que doy en esta entrada ha sido recogida  en internet.   ¿Es mucho pedir un poco de cautela antes de lanzarse a criticar?.

2)  Quiero reivindicar el buen nombre de los miembros de la comisión que han evaluado los proyectos.  Son, en su mayoría,  gente mal pagada, estupendamente formada, que tienen que compaginar sus tareas de investigación, con otras de gestión y, en muchos casos, dando además clases de Universidad.  Todo esto cobrando al mes lo mismo o menos que un policía municipal, dicho sea esto a título informativo y desde mi respeto y admiración a tan respetable cuerpo de empleados públicos.

Sacrificando  precisión a cambio de espectacularidad, como ocurre en cierta prensa,   le pido a Forges, Elvira Lindo y compañía que detengan el Escrache virtual que se está empezando a montar con mis ilustres colegas de la comisión.

The last, but not the least: a Pablo SJ, David J, Fernando D. , Alberto C. ,  y otros amigos y conocidos que no han logrado el RC, que tienen un CV espectacular,  y que se tienen que comer toda esta polvareda en el anonimato, les digo una de las frases típicas del legendario J. B. Goodenough:   keep pushing.





miércoles, 15 de mayo de 2013

Evaluando CVs: más allá de lo obvio.

Una de las diversas responsabilidades de los científicos es evaluar el curriculum vitae (CV) de  otros científicos.  Esto ocurre casi siempre en el contexto de procesos de contratación, pero también a la hora de evaluar la viabilidad de proyectos científicos y asignar financiación.  Por tanto,  nada menos que los puestos de trabajo y la distribución de fondos dependen están condicionados por la evaluación del CV. A la complejidad intrínseca de evaluar de un CV, se une la dificultad adicional de que las evaluaciones son comparativas o competitivas, es decir, que la evaluación tiene como objetivo   elegir entre varios candidatos.

Hay una serie de variables obvias que casi nadie va a omitir al mirar un CV:  número de publicaciones, calidad de las mismas,  número de citas, patentes.   Haciendo uso del web of science,   y si el nombre del candidato no es demasiado común,  podemos verificar esta información y obtener respuestas numéricas,  que inicialmente podrían parecer objetivas.  Por cierto,  todos deberíamos  hacer por extender la buena práctica de facilitar el rastreo por parte de otros de nuestra  información en el Web of Science,  usando por ejemplo el Researcher ID.  Volviendo al hilo, la invención del índice h hace posible  incluso sintetizar una buena parte de esta información en un único número.  Así, si el candidato A) tiene 30 papers, 500 citas y un h=14, y el candato B) tiene 10 papers, 200 citas y un h=9,  no hay que pensar más, ¿verdad?.   Pues puede que no.

Veamos:

* ¿Cuál es el número promedio de coautores en los papers?.   Si el candidato B hubiera hecho los papers el solo,  o con un único autor, y el candidato fuera siempre acompañado de 5 o más colegas, ¿cambiaríamos de opinión?

* ¿En qué posición aparecen  en la lista de autores? Si el candidato A no es el primer autor de ningún paper, y el candidato B es primer autor de 8 de sus 10 papers,  ¿cambiaríamos de opinión?.  Por cierto, la costumbre que tienen algunos grupos de ordenar a los autores por orden alfabético dificulta la tarea de evaluación y, salvo motivos de fuerza mayor como ocurre en el caso de colaboraciones de decenas de autores,  debería ser considerado una mala  práctica.

Consistencia  del CV (aquí debo dar le crédito  a mi colega Ramón Aguado).  ¿Qué pasa con un CV si quitamos todos los papers en los que aparece un coautor?.  ¿O si quitamos una afiliación?.  Es decir, ¿es el CV el resultado de colaborar con una determinada persona, o en un determinado grupo, o por el contrario el CV  aguanta el "stress test" de quitar un único coautor o una única afiliación?

* Años de experiencia.  ¿Cuántos años han necesitado los candidatos A y B para lograr sus resultados?.  Hirsch, el físico teórico que inventó el índice h,  ya advirtió sobre esto, y para ello propuso usar  el índice m=h/n, donde n es el número de años de experiencia. Por tanto, dos h no deben recibir la misma consideración  si han sido obtenidos en un número diferente de años, lógicamente.   Si el candidato B acaba de terminar la tesis y el candidato A lleva 4 años de postdoc .... ¿seguimos prefiriendo al candidato A?

* Citas vs porcentaje de citas.  Si comparamos dos científicos trabajando en el mismo campo, y en el mismo intervalo temporal,  entonces el número de citas una medida absoluta del impacto de ambos en dicho campo.  Pero si  el candidato A trabaja en un campo  se han publicado 20000  y B trabaja en un campo en el que se han publicado 500,  entonces la mitad de los papers del campo han citado a B, pero menos de un 3% han citado a A.   ¿Quien ha tenido más influencia?. Este es un tema especialmente delicado, porque  si adoptamos un punto de vista extremo podríamos estar animando a todo el mundo a trabajar en los temas de moda,  o en sentido contrario,  a perpetuar líneas de investigación que no le importan a nadie.

* Índice de impacto (II) de las revistas frente a número de citas del paper.   Cuando un artículo acaba de ser publicado,   y no hay por tanto tiempo para que haya sido citado, entonces el índice de impacto de la revista es un indicador útil de la calidad del trabajo. Si por el contrario  han pasado 3 o 4 años, entonces habría que mirar el número de citas del artículo en cuestión,  que es una medida directa del impacto del artículo, y no el II, que es una medida promedio del impacto de miles de artículos.

Lo  último,  pero lo más importante: media hora de conversación o entrevista con un candidato puede proporcionar una información mucho más adecuada que los diferentes indicadores del CV,  y en cualquier caso proporcionará una perspectiva adicional que será conveniente tener en cuenta.

Comentarios sobre mi lista de "cautelas",  e incluso otras adicionales, son bienvenidos.


jueves, 9 de mayo de 2013

Preguntas sobre el Programa Ramón y Cajal

Trás retrasar la convocatoria del Programa Ramón y Cajal (RC) más de 10 meses, y publicar en el BOE hace 1 mes  que la resolución se podría  retrasar hasta  6 meses más,  los gestores del programa me sorprenden una vez más publicando ahora la resolución.   Es quizá un buen momento para que la comunidad del I+D español,  a la que tanto bien ha hecho este programa,  reflexione sobre como mejorarlo.

Yo tengo aquí mi propia lista de preguntas, algunas coyunturales, y otras de más largo vuelo.

1)  ¿Cómo ha resuelto  la Secretaría de Estado de I+D (SEID) el problema de falta de "recursos humanos y materiales" que se enunciaba en    el BOE  publicado el viernes 5 de Abril de 2013?.  

2) ¿Es razonable que se adjudiquen contratos de 5 años de trabajo, remunerados al mismo nivel que el de profesor titular,  y con vocación de ser convertidos en permanentes, a personas  a las que no se entrevista? Conste que esto lleva siendo así desde la creación del programa, por parte de la ministra Birulés, pero es algo que yo creo que habría que modificar.

3) ¿Es razonable que, tal y como ha ocurrido únicamente en la última convocatoria, a los candidatos ni tan siquiera se les pida escribir un proyecto científico?.   El Estado va a contratar a 175 investigadores sin entrevistarles y sin preguntarles qué van a hacer.   Es obvio que la abundancia de candidatos de alto nivel, y el número pequeño de plazas,  actúan  como mecanismo de control de calidad. Pero, la lectura del listado de beneficiarios, me hace evocar la frase de mi abuelo Aquilino, de profesión agricultor: "ni son todos los que están, ni están todos los que son".

4) ¿Es razonable que la participación en proyectos internacionales fuese en la última convocatoria  un requisito imprescindible, por mor de la distribución de puntos,  para  optar a un puesto de RC?.  Si el perfil de aspirante a un puesto RC es el de un postdoc, ¿esperamos que un postdoc coordine proyectos europeos? Dado que esto es infrecuente, ¿ no se le está atribuyendo un valor excesivo a la participación en proyectos europeos, que es un mérito del grupo en el que trabaja el postdoc y no un mérito individual?.  ¿Y por qué habría  de pesar más la obtención de un proyecto de cooperación internacional de 20k€, por poner un ejemplo de uno que estoy pidiendo ahora y que son relatívamente fáciles de conseguir, que la de un proyecto del plan nacional Español en el que te concedan 100k€?

5) ¿Qué criterios se usan para decidir las diferentes áreas, y dentro de cada ellas el número de puestos que se adjudica?.  Lo pregunto desde la ignorancia.   Dicho de otra forma: ¿cuáles son las prioridades  de  la política científica de España?.  Por ejemplo, en la comisión de Física,  ¿es una decisión tomada de forma consciente que,  además de los 70M€  anuales que España destina (pero no paga) al CERN, a comparar con los 300M€ que cuesta el plan nacional de proyectos de todas las áreas,   los físicos de partículas se lleven además un porcentaje importante de puestos dentro del área de física?.   Y lo mismo me vale para los astrofísicos. ¿Cómo se decide esto?.  ¿Es un fenómeno auto-organizado, es decir, fruto de la dinámica de las comisiones evaluadoras y de las solicitudes, o hay alguien intentando dirigir las cosas?.

6) Abundando en el punto anterior, ¿es una decisión estratégica que,  si no estoy equivocado,  más de la mitad de los  puestos de Física se los han llevado gente del "big science"?.  Esto nos lleva al debate de "big science" frente a "small science" que en los US llevan teniendo décadas en público como queda maravillósamente ilustrado en los libros de P. W. Anderson (More is different)  y S. Weinberg (Dreams of a Final Theory). En España, este debate no ha salido de la cafetería de la facultad,  que yo sepa. Y que mis admirados colegas del big science  no se ofendan. Desde este blog he defendido varias veces  que España pague sus deudas con el "big science", y añado  que la solución del I+D español no pasa por desnudar a un santo para vestir a otro.

Mi última pregunta, y aquí si estoy barriendo  descaradamente para casa:
7) ¿Tiene sentido que no exista un área temática de Nanociencia y Nanotecnología en el programa RC?.  Tenemos varios centros específicos (ICN, Nanogune, INL, Imdea-Nanociencia, IUNA)  además de una comunidad pujante en este campo distribuida en el CSIC y al menos 20 universidades. Tenemos un razonable nivel de excelencia,  como prueba que hay  varios ERC "junior" y "senior" trabajando en nano en España.  Científicos españoles, o afincados en España, tienen un papel destacado en el graphene flagship.   ¿Tiene sentido que tampoco haya un área de conocimiento de Nano?


lunes, 6 de mayo de 2013

Pequeño pacto de gobierno por el I+D

Transcurridos varios días desde que Nature y Nature Materials le dedicasen sendos artículos a la política científica del gobierno de España, ambos pidiendo un cambio radical,  y uno diciendo literalmente que " the  biotechnologist responsible for science  in the government, the secretary of state  Carmen Vela, seems to be a hostage of the  minister of finance, Cristóbal Montoro",  el gobierno  no ha salido a desmentir que su ministro de Hacienda tenga a nadie secuestrado.   Suponemos que es una metáfora, porque vivimos en una  época en la que, cuando se lee sobre la política nacional,  uno tiene que discernir por su cuenta  qué crímenes son metáforas, y cuales no lo son, pero ya han prescrito. 

Supongamos entonces que Nature no acusa a Montoro de  tener metida a Carmen Vela en un zulo, y no porque no haya antecedentes de ministros involucrados en secuestros.  Lo que Nature Materials habrá querido decir es lo que se oye a toda la gente informada: que la Secretaría de Estado de I +D está paralizada porque el Ministerio de Hacienda retiene los fondos,  dificultando enormemente el margen de maniobra. Quizá es por eso que han retrasado más de una año varios programas de Recursos Humanos  del I+D Español (Ramón y Cajal, Juan de la Cierva,  Torres Quevedo),  por eso han secuestrado (digamos mejor retenido) los proyectos que se pidieron en 2012 y se concedieron en Enero de 2013.  Esto también explicaría por qué no se lanza la convocatoria de proyectos para 2014  que, de haber seguido  el calendario habitual,  se debería haber publicado en diciembre de  2012. 

Y dejando volar la imaginación, quizá Montoro esté detrás de que España no cumpla sus compromisos internacionales,  y no pague la cuota del CERN, de la ESF y de otras centros de investigación internacionales.  De no ser todo esto cierto,  cabría esperar un rotundo desmentido por parte del señor Montoro.  Que se meta en una tele de plasma, convoque una rueda de prensa,  y niegue  categóricamente ser el responsable de la parálisis del I+D español.      Mientras el gobierno no cumple con su deber mínimo de dar la cara e informar de cuál es la situación financiera del I+D español, y darnos una pista de la hoja de ruta,  yo tendré que suponer  que lo que publica el Nature es verdad: que todo este desastre de desfinanciación, desorientación y desconcierto se debe a que Montoro está peleado con De Guindos y le mete el dedillo en el ojo.... del I+D. 

Llegados este punto, la solución parece bien fácil: que haya un "pequeño pacto de gobierno por el I+D".  A diferencia de lo que se lee estos días en la prensa, no se trata de un "gran pacto de estado contra el paro".  Para lo del I+D no hace falta poner de acuerdo a sindicatos, patronal, PP, PSOE, ni tiene que intervenir su majestad el Rey, no le demos más guerra a este pobre hombre.   Para lo del I+D basta con que se tomen un café Montoro y De Guindos, o Carmen Vela,  y se pongan de acuerdo en: 
a) cumplir con lo que pone en el BOE (por ejemplo, si lanzan una convocatoria de proyectos de 3 años, no digan después que se paga en 4, y además no paguen durante 5 meses)
b) cumplir con los acuerdos internacionales que tiene firmados el reino de España (y pagar por ejemplo la cuota del CERN)
c) cumplir con los calendarios que llevan funcionando ya más de una década en lo relativo a los diversos programas del I+D, o establecer unos calendarios nuevos e informar a la comunidad 
d) no contar mentirijillas en el BOE (lo digo por lo que pusieron en el BOE sobre  la falta de medios para evaluar el programa Ramón y Cajal, cuando todos sabemos que las comisiones ya se han reunido  y  ya han hecho casi todo el trabajo)

No les pido una revolución. Solo les pido que cumplan  con el BOE, que tengan un calendario  y que lo cumplan,  que no ensucien la imagen de nuestro país con impagos a organismos internacionales y  que no cuenten trolas en el BOE.   Como ven, ni siquiera me estoy atreviendo a pedir que gasten más en el I+D.  Les estoy pidiendo que sean serios, cumplidores,  y que generen confianza.    Recuerden: el I+D es una apuesta que hace una sociedad sobre su futuro.  No fastidien el también el futuro.  



viernes, 3 de mayo de 2013

La película más pequeña del mundo

Las portadas de los medios de comunicación  digitales  de medio mundo se hicieron eco  el 1 de Mayo de la llamada "película más pequeña del mundo", hecha tomando imágenes de unos centenares de átomos mediante un microscopio de efecto túnel.      La película, titulada "A boy and his Atom" es otro de las "intangibles" que comentábamos el otro día,  salido del laboratorio de Andreas Heinrich en el centro de investigación que tiene IBM en San José, California.   Como experimento, no tiene ninguna aplicación práctica para el usuario, pero IBM se beneficia de una visibilidad que ninguna campaña de publicidad le proporcionaría. 

Al igual que cualquier otra película,  "A boy and his Atom" es una sucesión de imágenes, pero a diferencia de las películas convencionales, cada imagen está hecha por unos centenares de átomos, en realidad de moléculas de CO,  depositados en una superficie de Cobre.  El tamaño del "escenario" es apenas de unos 10 por 10  nanómetros, que vendido al precio de los pisos en Manhattan, no llegaría a un céntimo de peseta.  Ningun microscopio óptico tiene resolución para tomar  imágenes de algo tan pequeño, ya que la longitud de onda de la luz es muchísimo mayor que el tamaño  de los átomos.  

Cuando se trata de "ver" átomos,  estamos ciegos y necesitamos un bastón para tocarlos.  El bastón es una aguja metálica afiladísima cuyo movimiento se controla de manera extraordinariamente precisa, a través de una ingeniosa combinación de materiales piezoeléctricos controlados por un ordenador.  La punta de la aguja se puede acercar hasta una distancia de apenas  una décima de nanómetro (1 Amstrong). Una vez allí se puede hacer pasar corriente eléctrica entre la punta y la superficie. Para ello los electrones tienen que superar una barrera de potencial, la que los mantiene confinados en la punta y la superficie,  a través de un efecto mecánico cuántico conocido como "efecto túnel".  Por virtud de este efecto, la cantidad de corriente que puede pasar entre la punta y la superficie es extraordinariamente sensible  a la distancia que los separa.   Por tanto,  se puede hacer un mapa de la superficie con tal precisión que, si hay un átomo que sobresale,  es detectado por nuestro bastón, al que llamaremos STM, por sus siglas en inglés: Scanning Tunneling Microscope. 

Desplazando el bastón por toda la superficie se  obtiene información  sobre su topografia, que se representa en forma de mapa o imagen en  la pantalla del ordenador, para poder verlo con nuestros ojos.    Pero el bastón, es además  usado  para mover los átomos.  Así, para hacer la película,  Heinrich y 3 colegas más, trabajando por turnos durante dos semanas, movian los átomos en la superficie para ponerlos donde especificaba un guión del departamento de PR de IBM,   le sacaban la "foto" con el STM, y procedían a mover los átomos de nuevo, para tomar la siguiente, hasta un total de 242 imágenes,  para hacer un corto de poco más de un minuto. 

La campaña "viral" resultante,  es otro ejemplo de cómo la actividad científica guiada por la curiosidad, y no por las aplicaciones, o en este caso por la ciencia como algo  lúdico también tiene un impacto económico positivo.  Si en lugar de llenar portadas con nuestros 6 millones de parados, nuestros lios políticos,  nuestros aeropuertos sin aviones, nuestro parlamento asediado,  pudieramos enseñarle al mundo los resultados del talento de nuestros científicos,  algo contribuiríamos a mejorar la marca España.